por miriam y sofia con mucho amor ♡♡
<<Ximena!Tenemosquehablar>> fue una banda de post-rock/screamo de Bogotá, Colombia, activa entre el 2015-2017 con miembros de Encarta 98 y Empatía. Su sonido se caracteriza por sus guitarras gélidas con reverb y delay, baterías con fuerza, bajos densos y gritos ofuscados llenos de pasión.
ffo (for fans of): heaven in her arms, respire, envy.
La banda surgió como una manera de manejar el paso de las semanas: Fausto, Harold, Placenta y Juanma se veían todos los domingos para comer pizza, llorar y besarse en el parkway, ver evangelion y ensayar, todo para que los lunes no fueran tan horribles. La banda no tenía pretensiones más allá de hacerse la vida menos miserable entre ellxs; Ximena fueron los momentos que se pasaron juntxs, la amistad entre ellxs no dependía de hacer ruido.
Su único trabajo discográfico es su disco homónimo, el cual contiene canciones largas con gran protagonismo instrumental, letras poéticas con emociones pesadas que dibujan imágenes etéreas, gigantes, henchidas de tristeza y soledad.
Acontinuacion, descripciones de las canciones hechas por Sofi y Miriam
Primera canción, <<Instrucciones para abrir un poliedro>>
Tiene distintas secciones, la primera está en 11/8 y es completamente instrumental, post-rock puro y sensible que cierra con una voz hablando sobre un poliedro, después pasa a 4/4 acelerado y tenso con gritos ahogados como si fuese otra canción, todo para liberarse en un 6/8 lento instrumental liderado por un groove de batería preciso; una vez más la canción está abandonada a crecer en intensidad y abandonarse entre las guitarras gélidas, se suelta al vacío solo para resurgir con toda su fuerza en el final.
La canción me transporta a una especie de dimensión, todo allí es de plástico, figuras pequeñas con colores específicos que cambian melódicamente al ritmo de mis sentimientos. Me sumerge en un charco gigante de agua traslúcida; en él que hay un sapo que llegó sin aviso a mis ojos, es más grande que mis pensamientos y sensaciones, es más grande que yo. No puedo apartar la mirada de él, me envuelve, me acecha con paciencia, me reconoce, me lee, me muestra lo que es y ahora lo reconozco, soy yo. Complicidad absoluta, ojos fijos, sin palabras pronunciadas, todo está dicho. Mirarlo a los ojos es como sentir brotar de mi cabeza sentimientos de lejanía, es ajeno, soy ajeno; se sienten cuerdas agudas en las puntas de los dedos, es la única distancia entre su piel y la mía. Se está alejando, ya no está más, ya no estoy más.
Segunda Canción, <<El walkman de Shinji>>
Esta cancion es lenta pero fuerte, es ruidosa, es abierta, es intensa; los gritos suenan desesperados, abandonados. Relaciono mucho las estructuras de las canciones en este disco con subir montañas de emoción y abandonarse al rumbo que ésta dicte, muchas veces sube y sube solo para lanzarnos al vacío entre golpes. En el caso de esta, cada vez se prolonga más el vacío entre el ruido y los golpes abiertos de la batería, son como disparos que me empujan cada vez más abajo.
Veo llegar avanzando rápido, desesperada, una araña, sus ojos son inexistentes, cuencas pronunciadas de color marrón oscuro, con destellos donde la luz choca; aunque no pueda verme siento lo profundo que me observa. La lejanía es cada vez menor, se queda a escasos pasos de mi y empieza a tejer en mi cuerpo una envoltura precisa, como si fuese parte de su obra, sus patas me abrazan, lo hace metódica y cuidadosamente. Me veo como un insecto en un reflejo que se proyecta como un holograma en las cavidades donde sus ojos suponen estar, el olor es como el de algo que se dejó muchos días expuesto al sol y a la lluvia sin protección alguna, algo que se oxida y transforma a algo repudiable e inservible. Nada de esto está mal, nada de esto está bien, no se siente nada y esa sensación de irracionalidad e insensatez se apodera de mí, situaciones aleatorias me rodean, imposible procesarlas todas; la araña no es mala, aunque por segundos lo pensé, ella solo quiere algo suyo, todos queremos algo nuestro.
Tercera canción, <<Segundo Impacto>>
Esta canción es la más corta del disco, lo que la separa del resto en cuanto a los pedazos instrumentales con más introspección e ímpetu; los gritos tienen un lugar más protagónico junto a la batería intensa y los acordes melancólicos pero cortantes.
Fibras delgadas, agudas, cortantes y fluorescentes brotan de todas partes, se anudan entre sí como atando cabello fino, bailan y me atrapan, me consumen, hacen huequitos pequeños en mis manos y se hilan entrelazando movimientos involuntarios y poco deseados que me conducen con rumbo fijo hacia una botella plástica, amarillenta y estrecha, me quedo dentro de ella, se siente cálido aunque esté vacía; las fibras generan cada vez más tensión, se mueven sin censura ¡La botella no deja de agitarse y golpearse! Los colores son cada vez más intensos igual que el revoltijo de emociones que en mi surge.
Cuarta canción, <<Las casas nuevas no tienen fantasmas>>, (Quizás mi favorita del disco).
Comienza con un bajo grueso y ruido de guitarras, las guitarras parece que volaran, los sonidos son muy celestiales. En esta la voz es en su mayoría melódica, se siente apenas saliendo de la superficie del ruido de los demás instrumentos. En ningún momento la canción decepciona, se mantiene firme con el resto de canciones con sus altos catárticos y aguadores de ojos y sus abandonos musicales entre ruidos cada vez más tenues.
Ocho paredes de color pálido, apagado y solitario. Los recuerdos del pasto entre los dedos de los pies cada vez más presentes, la nostalgia retumba con eco por toda la habitación se vuelve imposible evadir ese nido sensaciones que crece en la garganta, no defino si quiero salir de esta habitación ya o me quiero quedar a contemplar por mucho tiempo todo lo que fue y todo lo que se sentía. Textura corrugada, firme pero aterciopelada en todo lo que toco, hojas y hojas llenas de palabras y garabatos tratadas con delicadeza por lo menos en mi cabeza.
Quinta canción, <<Besando a Rei Ayanami>>
Esta canción entra con mucha fuerza, los acentos golpean entre gritos, olas de ruido, rasgueos rápidos. Al poco tiempo la canción se abandona en una progresión de acordes que gritan soledad, gritan melancolía ahogada, todo esto se intensifica con la voz que señala y humilla la fragilidad, que dice conocer nuestro lado más vulnerable, herido y abandonado. Más adelante vuelven los gritos y la batería, suenan gigantes, patadas, una marcha de ruido que nos deja en la superficie de una playa como náufragos.
Corriendo rápido por la ciudad de Bogotá, sin precaución, sin meditación, alta velocidad; frenada inmediatamente por una mariposa negra e imponente que bloquea el camino, la conexión es inmediata y absoluta; con la mirada hace líneas rectas de color verde que se sienten congeladas, como hechas por una crayola que estuvo mucho tiempo dentro de una caja en la nevera, no entiendo el sentido de estas pero las percibo familiar, ya nos conocíamos, me cuenta cosas increíbles y mágicas. Ahora compartimos la crayola y lo único que pueden mis manos hacer son líneas continuas y circulares, fluidas con mis sentimientos que en contacto con el aire cambian de color naranja pálido.
Sexta canción, <<(No) Estás sola)>>
Los acordes, el bajo y la batería crean un lodazal denso que sube de velocidad mientras que la guitarra melódica, como si fuese un ave pequeña con mucho brillo. La canción alza vuelo, cae casi que tocando fondo y vuelve a arrastrarse ingravidamente hasta su final explosivo.
Nervios de punta, alterados, color morado, sumergida en un río gigante con piedras calientes que caen haciendo eco por todo el lugar, todo se ve empañado se siente inundado de incertidumbre y miedo, dedos arrugados y piel sensible; salgo de ahí con dificultad, de los árboles cae pintura café que se camufla para no estar más.
1. instrucciones para abrir un poliedro
2. el walkman de Shinji (el dolor no me deja dormir)
3. segundo impacto
4. las casas nuevas no tienen fantasmas
5. besando a rei ayanami
6. (no) estás sola
Llevaba rato buscandolo jaja
ResponderEliminarMuchas gracias